Cirugía estética genital lo más «fashion» de la estética

Compartir

Cada vez son más los hombres y mujeres que dejando de lado las tradicionales cirugías tendientes a mejorar su rostro, senos, mentón, abdomen, nariz, glúteos, etc., se vuelcan a los consultorios de los profesionales demandando sofisticados y costosos tratamientos de cirugía genital. La cirugía genital se ha convertido actualmente en lo mas «fashion» de la estética y el número de pacientes que recurren a implantes y correcciones de sus zonas genitales aumenta a diario.

Alargamiento de pene y remodelación vulvar

Los entendidos dicen que los tratamientos más requeridos son aquellos tendientes a alargar y engrosar el pene, además de correcciones estéticas de cicatrices, flacidez y ampliación de frenillo. No menos importantes son los pacientes que acuden solicitando implantes y remodelación de testículos y reducción del escroto, entre otros tratamientos.

La ginecomastia, tendiente a reducir las mamas en los hombres e incluso a aumentar los pectorales, es otro de los tratamientos requeridos y últimamente de moda.

Ellas quieren verse guapas

La cirugía genital en las mujeres es muy variada. Las mujeres concurren a consulta para reducir los labios mayores o menores de la vagina, corregir cicatrices en la zona, remodelación del monte de venus y la vulva. También a través de diferentes procedimientos se puede aumentar o reducir el tamaño de los pezones e incluso equiparar mamas de tamaños diferentes y colocar pezones invertidos. Son muchas las mujeres que se someten a este tipo de cirugías luego de una cirugía invasiva, como por ejemplo una masectomia (extirpación de mamas), llevándose a cabo como cualquier otro tipo de cirugía facial o escultural.

Generalmente la primer consulta tiene fines informativos y de reconocimiento del paciente, sus antecedentes clínicos y el consentimiento, requisito ineludible. Posteriormente el profesional efectúa un análisis teniendo en cuenta las ventajas y desventajas en cada caso en particular y se programa el ingreso de la paciente con limpieza de cutis, ausencia de medicamentos contraindicados y ayuno.

Aproximadamente media hora antes de la cirugía, el profesional realiza dibujos sobre la piel de la paciente indicando las zonas a operar y se prepara la anestesia. La anestesia dependerá de cada paciente y puede ser total o local, esta última – salvo alguna otra complicación- es la que se utiliza mas habitualmente.

Técnicas cada vez más complejas para la cirugía estética genital

Las intervenciones tienen una duración que varía teniendo en cuenta de que tipo de cirugía se trate y la técnica utilizada. Las que demandan mayor tiempo son aquellas que tienen por finalidad reducir los labios de la vulva en la zona genital femenina; y aquellas destinadas a alargar el pene. El post-operatorio no es tan traumático y los pacientes pueden llegar a experimentar un poco de hinchazón o tirantez que se solucionan con la toma de analgésicos y antiinflamatorios, además de los antibióticos que se recetan para evitar infecciones. Las cicatrices que pueden llegar a quedar son casi imperceptibles y las suturas son retiradas luego de varios días, dependiendo de la evolución de cada paciente.

¿Necesidad o coquetería?

Existen dos tipos de pacientes para este tipo de cirugías: los que realmente la necesitan luego de haber sido sometidos a cirugías invasivas o aquejados por algún tipo de dolencia que les significara quimioterapia, radioterapia o algún procedimiento similar; y por otro lado quienes lo hacen por cuestiones de autoestima y que deciden someterse voluntariamente para verse mejor.

Este tipo de cirugías puede resultar bastante costoso y por lo tanto es generalmente solicitada por gente con cierto poder adquisitivo. La edad de los pacientes oscila entre los 40 y 60 años y el sexo es indistinto. Lo que hasta no hace mucho era considerado un tabú, hoy en día es algo habitual y sentirse bien con uno mismo bien vale la pena una cirugía.

• Fotos
• Categorías

Cirugía plásticaCirugía estética Blog