Salud prenatal en el séptimo mes de embarazo

En el séptimo mes de embarazo realiza el control médico mensual, como de costumbre. Es posible que el médico te indique exámenes de diabetes en esta etapa.

Sigue ingiriendo alimentos saludables. Este mes aumentarás alrededor de 400 gr por semana.

Descansa todo lo necesario y comienza con las clases de preparto.

¿Qué ocurre en el séptimo mes de embarazo?

Este es un mes importante porque pueden comenzar las contracciones. Depende de la madre, del embarazo que lleve y del bebé, pero pueden comenzar y la frecuencia también dependerá en cada caso. Este tipo de contracciones se denominan Contracciones de Braxton Hicks, son ocasionales, y generalmente no duelen. Lo que ocurre es que el útero se endurece, se contrae un minuto y luego vuelve a su posición normal. En caso de que sean muy seguidas, aunque no duelan, hay que avisar al médico ya que no es normal y puede perjudicar al bebé.

Los síntomas nuevos entonces que sentirá pueden ser:

Calostro en los pechos.
Torpeza.
Dificultad para dormir.
Hemorroides.
Picazón en el abdomen.
Menor retención vaginal.
Contracciones.

Emocionalmente puede ocurrir que la embarazada comience a soñar con el bebé o con el parto. Esto se relaciona con la ansiedad y con el temor también, no solo del alumbramiento sino con la salud del niño, que no posea ninguna enfermedad o malestar.

Mientras tanto, adentro el feto continúa con su labor, engordando mediante grasa que se deposita en él. El bebé empieza a distinguir sabores, puede tener hipo, el cual sentirá la madre constantemente, puede llorar e incluso comenzar a chuparse el dedo. El reflejo de succión lo adquieren en la última etapa de este mes, por eso es importante esperar a que se cumpla porque en caso de nacer antes, el niño no sabrá succionar la leche del pecho.

El feto ya pesa más de un kilogramo y llena prácticamente todo el útero, es por eso que se reduce la cantidad de líquido amniótico y el tamaño de la placenta. Si nace, vivirá, aunque lógicamente no es lo mejor. Por eso, mamá, espera un poco más y mientras lo haces disfruta: dos meses pasan rápido.