Ejercicios aeróbicos durante el embarazo

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Durante el embarazo, muchas mujeres se preguntan si el ejercicio puede ser beneficioso o peligroso para el bebé; Los estudios que se han realizado indican que el ejercicio es bueno también en estos casos, aunque nunca se debe abusar de ellos pues a veces puden suponer contraindicaciones en el embarazo.

Partamos de la premisa que hacer ejercicio siempre es bueno, y durante el embarazo mucho mejor, pues no sólo te ejercitas para verte bien sino también para facilitar la tarea en el trabajo de parto y darle mayores oportunidades a tu bebé.

Realizar ejercicios durante el embarazo es muy recomendable, pero ha de hacerse siempre bajo la supervisión de un médico para saber qué tipo de ejercicios hacer según tu forma física y tu estado de gestación. Lo más importante es practicar ejercicios que no demanden mucho esfuerzo y no impliquen movimientos bruscos además de moderar la rutina a unos 30 minutos como mínimo.

Beneficios

Efectuar una rutina de gimnasia aeróbica favorece a la disminución de los dolores, problemas digestivos, estreñimiento o hinchazones del cuerpo, también corrige la postura, brinda mayor resistencia y tonicidad a los músculos y contribuye en un mejor desarrollo del trabajo de parto. Se ha comprobado que la actividad física ayuda a evitar la diabetes gestacional. así como también causa reacciones favorables en el aspecto psicológico al reducir el insomnio, la depresión y la ansiedad.

¿Tiene efectos negativos?

Actualmente no se han encontrado datos sobre efectos perjudiciales del ejercicio en el embarazo, tampoco sobre el aumento del riesgo de aborto espontáneo o defectos congénitos en un embarazo normal.

Por el contrario, gran cantidad de estudios demuestran que el ejercicio físico no afecta el peso del bebé, incluso contribuye al crecimiento de la placenta en los primeros meses, lo que permite darle mayor cantidad de oxígeno y nutrientes.

Ejercicios más recomendados

Los ejercicios más adecuados son aquellos que no demanden mucho esfuerzo ni sostener peso de más. Actividades como montar en bicicleta estacionaria o nadar se plantean como buenas opciones, así como caminar y hacer rutinas aeróbicas. Por el contrario, los ejercicios que se deben evitar son aquellos que se realizan sobre superficies duras, las que aumenten la presión o las que demanden mucho esfuerzo muscular.

¿Cuándo suspender la rutina de ejercicios aeróbicos?

La práctica de los ejercicios debe dejarse cuando se presenten los siguientes síntomas:

– Hemorragia vaginal
– Dificultades o esfuerzo para respirar antes de la actividad física
– Mareos, dolor de cabeza
– Molestias en el pecho,
– Debilidad muscular, dolor o hinchazón en las pantorrillas
– Reducción en el movimiento del feto o pérdida de líquido por la vagina.

Ejercicios en el primer trimestre del embarazo

En esta etapa deberás tomar mucha agua para mantenerte hidratada durante la rutina de ejercicios. Es recomendable mantener una adecuada temperatura corporal colocándote o quitándote prendas según la intensidad del ejercicio; controla también la respiración y si se dificulta mucho hay que hacerlos más espaciados y menos intensos, no hay que sobreexigirse.

Ejercicios en el segundo trimestre del embarazo

Al realizar la rutina de ejercicios ten siempre cerca una botella con agua para evitar la deshidratación, pues ésta puede acarrear calambres y contracciones. Realiza los cambios de ejercicio con tranquilidad y cuidado pues se puede perder el equilibrio debido al cambio en el peso y el crecimiento del útero. Desiste de la actividad si la respiración se dificulta y nunca te sobreexijas.

Ejercicios en el tercer trimestre del embarazo

Para esta etapa, el tamaño del vientre dificultará muchos de los movimientos, lo que requerirá que te apoyes en una superficie. Es preferible evitar las flexiones, los giros repentinos o cualquier movimiento que pueda hacerte perder el equilibrio, pues una caída podría lastimarte tanto a tí como al bebé.